No rechaces los sueños por ser sueños.
Todos los sueños pueden ser realidad, si el sueño no se acaba.
La realidad es un sueño.
Soñar es el modo que el alma tiene para que nunca se le escape
lo que se escaparía si dejamos de soñar
que es verdad lo que no existe.
Sólo muere un amor que ha dejado
de soñarse hecho materia y que se busca en tierra.